En la Sala Transylvania nos dimos cita, a pesar de mi dolor intenso, que a veces no me permite ni pensar, para celebrar el cumpleaños de Lain Romasanta en una fiesta solidaria que incluía entrada benéfica en favor de la protectora de animales Aloia. Este “capo” de la escena viguesa nos regaló una noche épica con los chavales de Other Game y la banda madrileña Rabia Pérez. A los primeros ya los conocía, a los segundos los descubrí esa noche, todo un placer.
OTHER GAME
Nunca es fácil, y en la mayoría de los casos no me resulta
interesante, hacer una reseña de una banda de versiones, pero en este caso hay
que hacer una excepción. Other Game no es una banda versiones cualquiera,
ellos, pese a su juventud, se puede decir que navegan en la primera división de
este tipo de bandas, el día que se lancen a las composiciones propias pueden
llegar a ser una banda a tener en cuenta. Por su edad son insultantemente
buenos. No quiero destacar a ninguno de sus miembros sobre los demás, Mateo Gallego
es un portento a la batería, a su edad le puede dar mil vueltas a muchos
bateristas profesionales y está llamado a ser alguien dentro del difícil mundo
de este instrumento; Patricia González Cabaleiro le da las versiones un estilo
personal con su tremenda voz llevándolas a terreno, hay algún «pero», pero nada
que el tiempo no lleve a corregir, joder, son insultantemente jóvenes; David
Costas es un bajista contundente perfectamente conjuntado con su compañero de
base rítmica e Isaac Rocha como miembro nuevo no resta, sino que suma, ¡y cómo
suma!.
En definitiva, un gran bolo, lleno de grandes composiciones
clásicas dentro del rock que nos llevaron a otra dimensión, sobre todo a los
que hemos pasado por la vida con ellas como banda sonora y que por un momento
nos llevaron a aquellos tiempos. ¡Gran bolo, muchachos!
Una última reseña: el día que estos chicos se atrevan con
composiciones propias lo petarán a poco que se lo propongan, o eso es lo que
quiero pensar. Menos mal que aún quedan jóvenes amantes de la buena música y no
de ruidos de usar y tirar que a día de hoy nos inundan.
Setlist: Smells Like Teen Spirit (Nirvana) / American Idiot (Green Day) / Are You Gonna Be My Girl (Jet) / Come as you Seven Nation Army (Nirvana-White Stripes) / Breaking The Law (Judas Priest) / Holiday (Green Day) / Holy Diver (Dio) / You Shook Me All Night Long (AC/DC) / For Whom The Bells Toll (Metallica) / 2 Minutes to midnight (Iron Maiden) (41 min. aprox.)
RABIA PÉREZ
Lo primero es decir que a partir de ahora llevaré mi camiseta
con orgullo, el orgullo de haberlas descubierto en esta fiesta y si hay algo que
me da rabia de haber pasado tanto tiempo desconectado de la escena española y de la música en general, es
no poder dar abasto de conocer tanta banda buena que hay en nuestro país, sí,
ojalá me hubiese pillado un poco más joven, pero como decía el buen Lemmy, si te
sientes viejo para el rock and rol, es
que lo eres… Sé que el problema real soy yo mismo.
Durante casi una hora nos desgranaron su ecléctica apuesta por
el rock más fuerte por momento y el rock salpicado de otras ciertas músicas que
en un principio nada tienen que ver con el rock and roll, pero que los de Fátima
Pérez los llevan a su puto terreno con una voz muy personal y de amplio
registro.
Rabia Pérez bebe de tantas fuentes que se me hace difícil
clasificarlas, ni lo pretendo, quien me conozca sabe que no me gustan las
etiquetas, o sólo coloco dos: “música que me gusta” y “música que no me gusta”.
Y sin dudarlo, después del bolo del sábado esta banda va con la primera. Letras mordaces e incisivas con una actualidad que nos apabulla.
Cada vez me cuesta menos escuchar mientras tiro de
fotografía, pero sin que sirva de disculpa, siempre me ha costado la multitarea
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Setlist: Los Pájaros / Los Elegidos / Rabia / Venganza / Otelo / Inmortal / Portales / El Ritual / El Martillo de las Brujas / Fénix / Premonición / Soldado (60 min. aprox)
Gracia a Lain, gracias a Other Game y gracias a Rabia Pérez.
Una noche rabiosamente inolvidable.
AHORA YO TAMBIÉN SOY RABIOSAMENTE FELIZ... NOS VEMOS EN OTRO JUEGO...
¡SEGUIREMOS GRITANDO!
